DIA 26 JUEVES
Durante todo este día, a través de las presentaciones de los informes de las diferentes Unidades, la asamblea se fue situando delante de cada realidad, a través de la reflexión y el diálogo, para terminar asumiendo, como grupo, la responsabilidad del Instituto considerándolo un TODO. Por eso las llamadas que se escucharon durante el día eran llamadas del Instituto, y para Instituto.
Termino el día con una oración de acción de gracias, por la riqueza de las luces recibidas y un texto de Xavier QUINZÁ que sugería al grupo como caminar hacia el futuro.
En este momento la situación de las comunidades es muy comprometida nos encontramos con el desafío de una reestructuración institucional, necesaria e inevitable. Ante ello se hace urgente una postura lúcida y generosa que lleva adelante el proceso con audacia y discernimiento., porque no hay respuestas a corto plazo. No debemos poner los ojos en soluciones inmediatas, la travesía es a largo plazo.
Preparar el futuro lleva consigo pensar en dos metas, una lejana y otra cercana, pero es necesario optar entre administrar la penuria o preparar el futro. Las dos cosas a la vez no se pueden hacer. El futuro es siempre novedad, lo que no se prevé, lo que viene de Dios. Ese futuro es la meta lejana, pero está la meta cercana hacia la que hay que trabajar día a día, porque es importante pensar e imaginar la novedad para encajar en ella lo que ahora somos.