Puso el Colegio a disposición de este gran acontecimiento. En él se hospedaron 50 jóvenes polacos. La comunidad participó con ellos en los actos que tuvieron lugar en Málaga. Las hermanas dicen: “Vimos a 1500 jóvenes, arraigados en Cristo y firmes en la fe así construyeron su vida y esa es la vida desbordante que han regalado estos días a nuestra ciudad de Málaga
HAY MUCHAS MANERAS DE COLABORAR CON LOS JÓVENES |
¿Cómo lo hizo la Sagrada Familia en las Jornadas mundiales de la juventud en España?, La Comunidad de Málaga, El Colegio de Nuestra Señora de Loreto de Madrid: Del lunes 15 de agosto al lunes 22 acogieron a 103 jóvenes provenientes de Argentina Tawian, Filipinas y Corea. Participaron 47 voluntarios de la parroquia entre ellos algunos del Colegio, madres de familia y muchos colaboradores. Entre las familias de acogida hubo una señora de 79 años que acogió en su casa a 7 chicas. Este gesto fue muy valorado por los jóvenes. Mª Paz Clemente Hermana de la Sagrada Familia de Burdeos. Que participó en las celebraciones dice: “En la celebración de la Eucaristía me llamó la atención la participación de los jóvenes, su recogimiento, silencio y paz interior, su actitud en general. En los voluntarios atrajo mi atención su entrega, respeto, alegría el servicio, la comunicación entre los distintos grupos, la facilidad para entenderse y la animación de los equipos. Agradezco la experiencia vivida con un profundo sentimiento de gratitud y alegría por el impulso que la juventud está dando a la Iglesia, por su testimonio de fe, la felicidad y alegría que inunda sus vidas, la certeza de que el seguimiento de Jesús da un sentido a la vida que transmite felicidad. Las profesoras voluntarias del Colegio comparten lo vivido “Somos Natalia y Ruth, profesoras del Colegio de Nuestra Señora de Loreto. Hemos vivido estas jornadas desde dentro….Hemos tenido la oportunidad de comprobar cómo la caridad es posible, especificando la cohesión de grupos y carismas, mirando todos en una misma dirección. Fue increíble comprobar cómo la visita de Benedicto XVI… nos ha reunido para dar testimonio de fe a personas de idiomas y culturas distintos pero con un lenguaje único: el lenguaje del amor. El vivir los valores evangélicos como la paciencia el servicio, la donación, la humildad… han calado a otras esferas civiles como barrenderos, personal del transporte público, personal sanitario y las empresas que han participado con donaciones para subvencionar las jornadas. Personas que inicialmente no habían venido a compartir la fe, pero sí a compartir la misión, se han contagiado por la vivencia de una fe viva, joven fuerte, arraigada y edificada en Cristo.” Desde Collado Mediano… Pueblo cercano a Madrid donde la Sagrada Familia está presente a través de la Comunidad. “Del 15 al 22 de agosto el albergue se llenó con 82 irlandeses. Otros 574 italianos se instalaron en el colegio público y en el polideportivo. Las familias del pueblo acogieron a 44. En nuestra comunidad alojamos a dos chicas y tres chicos, que nos ayudaron mucho. El pueblo entero los recibió con alegría música y una fiesta preparada donde españoles e irlandeses se divirtieron juntos. Cenaban y comían muchas veces en el porche del albergue…Algunas noches terminábamos de recoger a las dos de la mañana…Era mucho trabajo pe nos ayudaban los voluntarios y entre todos trabajábamos contentos y felices…Al final de parte de los jóvenes un acto de despedida lleno de gratitud y afecto” Clemente Fernández (Madrid) Las tres hermanas de la comunidad nos prestamos como voluntarias para trabajar en este acontecimiento eclesial. Llevamos preparando este acontecimiento desde hace dos años con una etapa de sensibilización a través de la catequesis, reuniones y cursillos para voluntarios, celebraciones para todo el pueblo de Dios. Los acogimos en la parroquia el 15 de agosto. Vivimos la alegría del encuentro con estos jóvenes que llegaban de Murcia, cansados pero muy contentos…A continuación fueron llegando jóvenes de Austria, Portugal, Francia, Canadá, Italia…En casa alojamos 4 jóvenes ecuatorianas que vivieron con seriedad y alegría este acontecimiento…Nos impresionó ver a los jóvenes recogidos en oración personal, en muchos momentos se notaba que oraban con profundidad…En todas las tareas que realizamos: repartir desayunos, agua, limpiar atender a los enfermos …vivimos una profunda experiencia de universalidad y catolicidad de la Iglesia, gozo y esperanza al ver esta multitud de jóvenes, unos 25.000 amplitud de horizontes al compartir la vida y la fe de tantas personas con diferentes razas y culturas, de sentirnos protegidas y sostenidas por la fuerza del Señor en momentos de dificultad, también tuvimos un sentimiento de pena al constatar que las Hermanas de la Sagrada Familia nos participábamos con algún grupo de jóvenes en este acontecimiento…Hemos vivido estas Jornadas Mundiales de la Juventud como un verdadero acontecimiento espiritual. Hemos experimentado unión y fraternidad, relaciones sencillas, sinceras y amables, colaboración en el trabajo, fuerza en la oración, gozo y alegría en el servicio. Hemos vivido una experiencia de comunión entre todos. |
