Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos

En el hemisferio norte la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos se celebra tradicionalmente del 18 al 25 de enero. Estas fechas fueron propuestas en 1908 por Paul Watson para cubrir el periodo entre la fiesta de san Pedro y la de san Pablo, que tienen un significado simbólico.

Buscar la unidad durante todo el año

 

En el hemisferio norte la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos se celebra tradicionalmente del 18 al 25 de enero. Estas fechas fueron propuestas en 1908 por Paul Watson para cubrir el periodo entre la fiesta de san Pedro y la de san Pablo, que tienen un significado simbólico. En el hemisferio sur donde el mes de enero es tiempo de vacaciones de verano, las Iglesias frecuentemente adoptan otra fecha para celebrar la semana de oración, por ejemplo en torno a Pentecostés (sugerido por el movimiento Fe y Constitución en 1926), que representa también otra fecha simbólica para la unidad de la Iglesia.

Teniendo presente esta exigencia de flexibilidad, invitamos a utilizar estos materiales a lo largo de todo el año para expresar el grado de comunión que las Iglesias ya han alcanzado y para orar juntos para llegar a la plena unidad querida por Cristo.

 

 

¿Qué exige el Señor de nosotros?

(Cf. Miqueas 6, 6-8)


Semana de Oración por

la Unidad de los Cristianos

 

Del 18 al 25 de Enero 2013

 

 

Para conmemorar su centenario, se invitó al Movimiento Estudiantil Cristiano de la India (siglas en inglés: SCMI) a que preparara los materiales para la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos (SOUC) 2013, y este a su vez hizo partícipes a la Federación Universitaria Católica de toda la India y al Consejo Nacional de las Iglesias en la India. En el proceso preparatorio, al reflexionar sobre el significado de la SOUC, se decidió que en un contexto de gran injusticia hacia los dalits en la India y en la Iglesia, la búsqueda de la unidad visible no se puede disociar del desmantelamiento del sistema de castas y el reconocimiento de las aportaciones a la unidad por los más pobres entre los pobres.

En el contexto indio, los dalits son las comunidades consideradas ‘parias’. Son las personas más afectadas por el sistema de las castas, que es una modalidad rígida de estratificación social fundada en la noción de pureza e impureza ritual. En este sistema, las castas se distinguen en ‘superiores’ e ‘inferiores’. Las comunidades dalits son consideradas las más contaminadas y contaminantes. Se sitúan fuera del sistema de las castas y en el pasado incluso se las calificaba de ‘intocables’. A causa del sistema de las castas, los dalits son marginados socialmente, infrarepresentados políticamente, explotados económicamente, y culturalmente subyugados. Casi el 80% de los cristianos indios es de procedencia dalit.

 

El camino para el discípulo de Cristo implica caminar por la senda de la justicia, la misericordia y la humildad. La metáfora de ‘caminar’ ha sido elegida para enlazar los ocho días de oración, ya que, como una acción activa, intencional y prolongada en el tiempo, la metáfora de caminar transmite el dinamismo que caracteriza el discipulado cristiano. Además, el tema de la décima asamblea del CMI que tendrá lugar en Busan, Corea, en 2013 – “Dios de vida, condúcenos a la justicia y la paz”, resuena con la imagen del Dios trinitario que acompaña a la humanidad y entra en la historia humana invitando a todos los pueblos a caminar juntos.

Los ocho subtemas para la semana – Clic aquí para la oración

 

Lo que Dios exige de nosotros hoy es que caminemos por la senda de la justicia, la compasión y la humildad. La senda del discipulado supone caminar por el camino estrecho del reino de Dios y no por las autopistas de los imperios de hoy. Caminar en esta senda del derecho conlleva las estrecheces de la lucha, del aislamiento que acompaña la denuncia y de los riesgos ligados a la resistencia a “las potencias invisibles que dominan en este mundo” (Ef 6, 12). Esto es especialmente verdad cuando a los que hablan francamente a favor de la justicia se les trata de alborotadores y perturbadores de la paz. En este contexto tenemos que entender que la paz y la unidad son plenas cuando se fundamentan en la justicia.