LOS DEMÁS NOS AYUDAN A VIVIR LA CUARESMA

 

La casa donde celebramos la asamblea del Brasil se llama “El Arsenal de la Esperanza”.  A este lugar, hace muchos años, cuando se abolió la esclavitud en Brasil, llegaron 4 millones de italianos, buscando trabajo en  las plantaciones de café.  Actualmente es una casa de acogida para “la gente de la calle”, y a la vez, un espacio de convivencia para jóvenes de  la región de Ipiranga, a la que pertenecemos. El día 21 de febrero   tuvo lugar el primer retiro para jóvenes. Nosotras participamos con el grupo de la Parroquia de San Alfonso. La frase que quedó grabada en sus corazones fue: “Bineventurados los limpios de corazón porque ellos verán a Dios”. Finalizó la jornada con un Viacrucis compartido con los “sin techo”, que estaban en la casa . Para nosotras fue una llamada a contemplar la realidad de los “cristos” que sufren en nuestras ciudades.

 

Invadió el espacio un sentimento de Iglesia, de hijas e hijos amados y amadas de Dios, que desean ser un apoyo para quien se siente rechazado o busca su identidad, para quien sufre soledad e incomprensión.

 

Terminamos el retiro con una Misa, donde celebramos los 40 años del capellán del Grupo de Acción Pastoral de Diversidad Sexual, que congrega a las personas de diversa orientación sexual, incluídas sus famílias. Comenzamos la Cuaresma con estos hermanos y hermanas que en este espacio pueden expresar, con libertad, lo que son, o lo que desean ser. 

Silvia Elena Coronel Mundaca

Communauté de  Paulo de Moraes.