En este ambiente alegre de navidad la iglesia universal celebra la fiesta de la Sagrada Familia de Nazaret, en un contexto social donde nuestras familias están muy deterioradas por diversas circunstancias, anhelantes de paradigmas
creíbles a quien seguir.
La liturgia de este domingo nos presenta en el Evangelio de Lc.2, 22 - 40 un episodio de la vida familiar y compromiso de fe con Dios: José y María van al Templo de Jerusalén a cumplir con la Presentación del Niño, el hijo primogénito, según la ley de Moisés.
Nuestro Buen Padre, Pedro Bienvenido Noailles, dentro de su inspiración de fundador, vio por conveniente dejarnos como modelos de vida a la Sagrada Familia de Nazaret. “Jesús, María y José deben ser sus modelos, tanto en la vida oculta como en los trabajos de la vida activa”. (G.E. N°39)
Hoy, los Miembros de la Sagrada Familia somos llamados a tomar muy en serio la invitación: “Id a Nazaret y contemplad” para llenarnos de sus valores, virtudes… así tener impulso para vivir nuestro Carisma de Comunión, empezando por casa con los más próximos/as.
¡Qué podamos vivir como la Sagrada Familia, anunciándola y promoviéndola con pasión para que otras familias también se sientan atraídas a vivir tras los pasos de J.M.J.!
Así mismo el Papa Francisco nos recuerda: “Tener un lugar a donde ir, se llama hogar. Tener personas a quien amar, se llama familia, y tener ambas se llama Bendición”.
Tengamos todas/os una feliz fiesta de la Sagrada Familia que renueve nuestro compromiso, en el cual vivamos bendecidas/os de pertenecer a la Familia de PBN.
Rubeni Pejerrey Campodónico
Perú – América Latina